lunes, 28 de mayo de 2012

Me estreso... Me engordo!

Efectos del estrés en la ganancia de peso corporal

Especialistas de diferentes disciplinas han comenzado a relacionar el sobrepeso y la acumulación de tejido graso en el abdomen, con el nivel de estrés que se puede llegar a sufrir en forma crónica.

La explicación del sobrepeso corporal que padece un 50% de la población mundial puede tener su origen en el estrés, cuando lo experimentan, recurren a la comida para aliviarlo.

Esta situación se llama hiperfagia y afecta a dos tercios de la población estresada, y consiste en apoyarse en la comida para aliviar la tensión acumulada para bajar el nivel de estrés.

El cortisol es una hormona que se libera en grandes cantidades en los momentos de estrés, entre otras funciones, prepara para la acción produciendo un catabolismo grande de proteínas, grasas e hidratos de carbono, por eso aumenta en situaciones de peligro, ya que le permite al cuerpo disponer de energía para la acción.

La comida disminuye los niveles de cortisol, siendo un alivio temporal de la sensación desagradable de experimentar estrés. Como la mayoría se siente bien luego de comer, si al rato sobreviene otro momento de tensión, se vuelve a comer, generando un círculo vicioso que terminará en sobrepeso.

El estrés crónico induce a comer más, los nutricionistas relacionan esto con la elevación del Neuropéptido Y, un neurotransmisor que se asocia con la elevada ingestión de comida y la disminución de la actividad física.

Pero parece que el Neuropéptido Y de los nervios periféricos puede actuar directamente sobre el tejido adiposo, de ahí que hay un 15% de pacientes que sin ser obesos, tienen un exceso de grasa abdominal.

La solución pasa entonces por iniciar un programa antiestrés que te permitirá disminuir los niveles de ansiedad, para que de esta manera puedas iniciar una dieta que te permita obtener un déficit calórico y de esta manera adelgazar.
Artículo de http://remedios.innatia.com 

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Convate el estrés con el yoga

Yoga para combatir los síntomas de estrés

Ejercicios de yoga para aliviar el estrés
El yoga puede ser una de las mejores maneras que tienes a mano para luchar contra el estrés. Algunos de los asanas (posturas) del yoga, pueden llegar a servirte para relajarte y despejar tensiones. Además, es una disciplina que trabaja también sobre el aspecto psíquico. Informate más sobre el tema en este artículo.

El estrés es uno de los males más crecientes de nuestros tiempos. La presión del día a día, la sobrecarga de ocupaciones y la imposibilidad de algunas personas para desconectarse de la rutina están causando estragos. Pero todo esto puede evitarse de diferentes maneras. Una de ellas es recurriendo a la práctica de yoga.

Al ser el yoga una disciplina que combina el equilibrio físico y psíquico, la relajación se dará por ambas partes, lo cual es muy importante. Siempre es mejor apuntar a ambos frentes que solamente a uno de ellos.

Las posturas que se proponen mediante los asanas pueden ser muy beneficiosas para lograr despejar cuerpo y mente, trabajar sobre la relajación de los músculos pero también sobre el control de la ansiedad. De hecho, existe una disciplina llamada hatha yoga que hace especial énfasis sobre este aspecto.

La afamada yogui Indra Devi afirmó hace algún tiempo que "la ciencia del yoga tiene una parte dedicada exclusivamente al correcto cuidado del cuerpo humano y de todas sus funciones, desde la respiración hasta la excreción". Así es como podrás lograr desconectarte de tu rutina mediante su práctica.

Video cortito para prácticar yoga en casa y reducir el estrés:

http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=yUXBMm-RZvM 

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El significado de los gemidos en el sexo

Gritos, suspiros y gemidos que hacen de la experiencia algo sublime, sensual y excitante, y que dicen más de lo que crees

Gritos, suspiros y gemidos; los sonidos del amor son tan variables como las preferencias de cada persona al hacer el amor. Ambos sexos experimentan la sensación de exclamar cualquier tipo de ruido cuando sienten placer o se encuentran en pleno clímax.
 

Más que sensaciones placenteras


Claro que emitir sonidos es algo natural, pero hay parejas que se ven envueltas en el dilema de "gritar o no gritar", pues para muchos hacerlo les parece vergonzoso o humillante, lo que lleva a reprimirse de disfrutar esta sensación.

Estadísticamente las mujeres son las que más gritan durante al sexo aún sin haber llegado al orgasmo; por otra parte, los hombres son menos expresivos y la mayoría de las veces suelen gemir cuando están al tope de su clímax. Lo que es un hecho es que ambos experimentan un sentimiento de alivio cuando logran exclamar estos sonidos.

Sonidos para prender la llama


Aún cuando existen parejas que prefieren callar durante el acto sexual, existen otras que gustan de hacerlo debido a que escuchar este tipo de sonidos les resulta una experiencia erótica.

Los sonidos son unos estimulantes muy poderosos, ya que ambos sexos disfrutan y se excitan al saber que causan placer en su pareja y es por medio de los gemidos y palabras que se enteran de tan satisfactoria sensación.

El sexólogo Martín Velazco comenta señala que las formas de expresión varían dependiendo el nivel de comunicación y confianza con la pareja. "Muchos hombres gustan de escuchar a ellas gritar y gemir mientras hacen el amor ya que se refuerza la seguridad en el acto; por el lado de la mujeres, también se experimenta cierto placer al escuchar su pareja, aún cuando ellas son más expresivas".

La empatía es parte fundamental para no caer en malentendidos respecto al tipo de sonidos e inclusive palabras que se pueden llegar a emitir; "algunas veces la pasión hace que se expresen ciertas cosas que pueden parecer desagradables o incluso ofensivas; sin embargo, ya dependerá del nivel de comunicación y conocimiento de su pareja para no mal interpretarlas", añade Velasco.

Curiosidades de gritar o no


1. Los seres humanos no somos los únicos que realizamos sonidos durante el sexo; de acuerdo a un estudio publicado en el sitio LiveScience.com, los monos también lo hacen; un 86% de las hembras gimen en el acto para estimular a los machos y estos logren llegar al clímax; la investigación también reveló que sin estos sonidos hechos por ellas, su pareja nunca eyacularía.

2. La excitación producida por los gritos y gemidos puede llegar a ser tan fuerte o inclusive más que la estimulación directa a los órganos sexuales; gracias a que la sensibilidad del oído, provoca efectos para que se pueda lograr esto.

3. Los sonidos que se realizan durante el sexo no siempre ocurren cuando se tiene un orgasmo, estos pueden anteceder al mismo y subir de intensidad conforme se va alcanzando el clímax.

4. Un estudio de Inglaterra reveló que un grupo de adolescentes malinterpretaron los gritos de una chica que mantenía relaciones sexuales con su novio al creer que era víctima de un asalto; los jóvenes propinaron tremenda golpiza al amante para "salvarla".

5. El periódico inglés The Sun, dio a conocer otra noticia relacionada al sexo y los sonidos: el caso de Caroline Cartwright, quien fue acusada por sus vecinos de gritar despavoridamente cada noche que mantenía sexo con su esposo, situación que la llevó a ser condenada por un juez a nunca más volver a exclamara cualquier ruido durante el acto.

Estos datos curiosos, encierran anécdotas divertidas que no deben asustarte, el placer es de quien lo trabaja y si deseas gritar, gemir o suspirar al sentir una caricia o momento de locura sexual, hazlo, no te arrepentirás de expresarte y eso reforzará los lazos de confianza con tu pareja.

Artículo de esmas.com

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Adictos a la Infelicidad

Es sorprendente (cuando se desconocen las verdaderas causas), ver cómo existe gente se auto-boicotea, de cómo observamos a personas, quizás muy queridas para nosotros, permanecer en situaciones o relaciones que las hacen profundamente infelices pero que no desean cambiar. Es como si su placer o refuerzo (lo que reciben y les compensa de estar de esa determinada manera) las hiciera pensar que son felices cuando objetivamente no lo son y las estamos viendo sufrir, desde nuestra perspectiva.

Muchas de estas situaciones encuentran su explicación en la infancia de dichas personas. Las experiencias más tempranas aún pueden seguir vivas e interfiriendo de manera encubierta con nuestra capacidad para crearnos la vida que deseamos. En nuestro camino se interponen conceptos negativos que hemos ASUMIDO tanto sobre nosotros mismos como sobre los demás, conceptos que probablemente aprendimos antes incluso aprender a hablar y, con seguridad, antes de que pudiéramos tener una mente adulta como la que poseemos. Estos conceptos asumidos pueden ser invisibles a nuestros ojos, pero son tan reales como una gran roca y ejercen una tremenda influencia en nuestra vida cotidiana.

Opuestamente a lo que algunas teorías promulgan, todos los recién nacidos llegan al mundo sintiéndose optimistas con respecto a las relaciones humanas, con una cantidad de felicidad interior,  adoran a sus padres y nacen con la convicción de que, como bebés, son seres tan adorables que sus padres, de forma natural, quieren cuidarles y darles mucho amor. Esto hace que los niños sientan que todo lo que experimentan, tanto lo bueno como lo malo, es una expresión del amor que necesitan porque eso ES LO QUE SUS PADRES QUIEREN PARA ELLOS. Como aman a sus padres plenamente, su MAYOR DESEO es imitarles en todo y tratarse a sí mismos igual que sus padres los tratan a ellos.

Con el paso del tiempo, el bienestar innato del niño criado por unos padres conscientes de si mismos y que entienden bien la educación infantil se hace fuerte como una roca y no se tambalea a pesar de los altos y bajos que puedan ocurrir en su vida. Ciertamente, cualquier persona que sufra una pérdida o una desilusión importante en la vida se sentirá triste, pero aquellas cuya felicidad interior es estable no desarrollaran la necesidad de culparse a sí mismos o a los demás buscando consuelo cuando las cosas no van bien.

Si por el contrario fuiste criado, con la mejor de las intenciones sin duda, por unos padres cuya inteligencia emocional era deficiente, y supongamos que ellos, siguiendo esa creencia popular (aunque dañina) de dejarte llorar hasta que te durmieras (pensando por su parte que eso te beneficiaría, te fortalecería el carácter y te haría más independiente cuando fueses mayor), te habrías quizás sentido angustiado no solo por el cansancio o la incomodidad lógicas en un bebé antes de dormir, sino porque tus padres, las personas más importantes para ti en esos momentos, no venían a rescatarte o consolarte. Si en los primeros años de su vida tus lágrimas no encontraron consuelo, en vez de pensar, como lo haría un observador imparcial adulto, que te estabas sintiendo mal, creerías que esa infelicidad que no fue consolada era el ESTADO IDEAL que tus adorados padres querían que experimentaras. Al sacar la conclusión de que esos sentimientos de infelicidad representaban la verdadera felicidad, de manera natural, desarrollaste un fuerte deseo o necesidad de volver a reproducir esos sentimientos. Al hacerte mayor, quizá hayas empezado a pensar inconscientemente que, ya que tus padres querían que te sintieras infeliz, cuando te sientes demasiado feliz estas traicionándoles o decepcionándoles.

En otras palabras, no llegamos a este mundo siendo ya poco sociables, manipuladores, con tendencia a ser malcriados, chantajistas o dependientes. No fueron nuestros genes los causantes de esos rasgos de nuestra personalidad que nos hacen a veces la vida difícil tanto a nosotros como a los que nos rodean. La sorprendente y simple verdad es que, sin darte cuenta, como la mayoría de la gente, en alguna ocasión probablemente hiciste que tu vida o (la de los que te rodean) fuera difícil o infeliz porque el amor que sentías por tus padres le llevó a confundir felicidad e infelicidad. Al fin y al cabo, el niño desea como fin último cumplir las expectativas y deseos de sus padres.

A MODO DE EJEMPLO:

Quizás seas una de las muchas personas que periódicamente se sienten inseguras o que creen no están a la altura de las circunstancias, es probable que cuando eras niño esperaran demasiado de ti (mucho más de lo que es exigible a un niño, pero que como niño desconocías que era excesivo), y por ello crecieras con el sentimiento de que, con frecuencia, estabas decepcionando a tus padres y a otros adultos importantes para ti al pensar que no estabas cumpliendo sus espectativas.

Esta sobreexigencia que se proyecta al niño suele tener su origen en la creencia errónea que a la mayoría de los padres se les enseña acerca del cuidado de sus hijos, y se trata del creer que al llegar a ser adultos, se comportarán socialmente como lo han hecho cuando eran niños, y también suelen pensar, erróneamente, que las buenas cualidades de los adultos, tales como la generosidad y la responsabilidad, deben enseñarse desde muy pronto o nunca se podrán aprender. En general, se espera que los niños, desde los primeros años de vida, sean sinceros, buenos hermanos, buenos perdedores, que coman bien y que hagan siempre sus tareas.

Si te has sentido identificado no temas, una adicción a la infelicidad no es el resultado de una voluntad débil, del temperamento con el que naciste o de un problema de carácter. Paradójicamente, es algo que surge del deseo innato y positivo de querer disfrutar de relaciones satisfactorias y de felicidad interior. Deseo constructivo que ha podido ser distorsionado involuntariamente a comienzos de la infancia y crear como resultado una necesidad no identificada de sentirse “feliz”, reproduciendo esa infelicidad que le es tan familiar de sentirse castigado, rechazado, desatendido o que le exigen demasiado.

No es nuestra intención culpar a los padres o a otros adultos que fueron importantes ti. Las personas que te cuidaron lo hicieron lo mejor que pudieron y, con seguridad, solo querían lo mejor para ti. Examinar las experiencias de tu infancia es útil porque la única manera de mejorar tu vida permanentemente es comprender por qué y cómo los efectos de estas experiencias te están influenciando hoy en día.

LIBRO: Adictos a la infelicidad.
AUTORES: Martha Heineman Pieper & William J. Pieper.

Ir al Psicólogo.. ¡Yo no estoy loco!

Desmitificando al psicólogo


Si te duele una muela, vas al dentista, si tienes un problema de salud, vas donde un médico, si tienes un problema legal, consultas con un abogado, si tienes un problema financiero, llamas a un contador o a un economista. ¿Por qué no consultar a un psicólogo o a un psiquiatra cuando me siento nervioso, intranquilo, angustiado, tengo problemas emocionales o no puedo comunicar mis ideas, mis pensamientos o mis sentimiento a los demás, o mi comportamiento me causa problemas o causa problemas a otros o no logro salir adelante y progresar?
 
El común de la gente tiene la idea irracional de que consultar con un psicólogo o un psiquiatra y asistir a una psicoterapia significa que uno está “loco” o que es un “enfermo mental”.

La idea irracional de que los psicólogos y los psiquiatras tratan solo a “locos” proviene probablemente de la aureola de misterio y secreto que se le ha creado a estos profesionales. Persiste además  la idea de que “los trapitos se lavan en casa”. Hay temor a demostrar nuestras incapacidad o limitaciones, nos resistimos a otros conozcan “nuestros secretos” o por la resistencia al cambio y las defensas que utilizamos al adaptarnos a situaciones nuevas o diferentes o por temor e ignorancia de la labor que cumplen estos profesionales.

Los avances de la ciencia y de la tecnología, además de los estudios que se han realizado y se realizan en la actualidad, nos proporcionan un conocimiento cada día más profundo del ser humano y de sus manifestaciones. La psicología, ciencia que estudia los procesos mentales y la conducta de las personas, nos puede informar cómo los seres humanos sienten, piensan, aprenden y conocen para adaptarse al medio que les rodea y nos ayuda a conocer y explicar su comportamiento a través de diferentes teorías, además de  predecir sus acciones futuras pudiendo intervenir sobre ellas.

Todos, en algún momento de nuestras vidas, como seres humanos que somos y que interactuamos dentro de una sociedad, nos hemos enfrentado a conflictos y traumas. Nuestra adaptación a ciertas circunstancias y hechos pueden haber sido difíciles y dolorosos- El sufrimiento probablemente nos hayan cuasado trastornos y síntomas que nos hayan hecho sentir limitados e  incapaces encontrar solución al problema, por nuestros propios medios. Algunos probablmente han  acudido a un familiar o persona de  confianza; se alivió el sufrimiento y el problema, aparentemente se solucionó. Pero en muchos casos y en especial aquellos en los que no se han aportado soluciones. los problemas y síntomas se mantienen con consecuencias en nuestra vida personal, en nuestro trabajo, en nuestra familia.

La terapia aplicada por un profesional de la psicología o la psiquiatría,  es una asistencia o ayuda que se diferencia de la ayuda informal porque proviene de una persona formada y autorizada para prestar esa ayuda y lo apoyan teorías científicas que le permiten determinar el origen de los trastornos y la forma de aliviar sus consecuencias

Ir a un tratamiento con un profesional de la psicología o la psiquiatría no nos limita ni nos incapacita. Es un profesional especialmente entrenado para brindarnos ayuda solidaria, para lograr una mejor comprensión y aceptación de nosotros mismos y cambiar nuestras actitudes hacia nosotros, hacia los demás y hacia el mundo en general. La terapia que nos brindan constituye una situación de aprendizaje en la cual se va a producir una reeducación emocional y una reestructuración o entrenamiento de la funciones de comunicación y  de relación, las cuales se consideran afectadas en la persona.

Es un campo privilegiado donde la persona tiene la oportunidad de tomar conciencia y lograr verse como realmente es y no como creía ser. Nos revela el sentido de las conductas que en lo cotidiano de la vida parecen neutras, aunque se sufra por ellas. Así, los síntomas o trastornos van resultando significativos en la medida misma que vamos comprendiendo el papel que juegan en nuestra vida y nuestra salud.

El objetivo entre otros, es disminuir el sufrimiento y el malestar psíquico, los sentimientos de angustia; eliminar o adecuar los sentimientos de insuficiencias, logrando una mejor aceptación de sí mismo; desarrollar habilidades y capacidades que están en déficit y crear una mayor disposición hacia las relaciones interpersonales, disminuyendo o eliminando sus trastornos en la comunicación con los otros y la inadecuada resolución de conflictos; excluyendo con realidades, información y lógica, los mitos, creencias e ideas irracionales que nos provocan dificultades emocionales y de comportamiento; disminuyendo o eliminando diversos trastornos psíquicos y somáticos que como consecuencia de los primeros (o a la inversa) están presentes en nosotros y por último, lograr que el pasado no nos agobie, vivamos el presente y planifiquemos nuestro futuro con expectativas positivas. En otras palabras, nos ayuda a mejorar nuestra salud mental, familiar, laboral y social.

Alejandra Palacios Banchero de Tinoco

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Las Caricias... Son verbales y no verbales

Psicología de la Vida Cotidiana

Todos nosotros necesitamos atención. Tenemos necesidad de ser tomados en cuenta. Esto es una necesidad vital. Es tan vital como el alimento y el aire que respiramos.

La falta del estímulo de ser tomados en cuenta en los primeros años de vida trae consecuencias graves a nivel mental, social y físico.

Esta necesidad de atención se ve satisfecha a nivel de las caricias. Las caricias con un término que acuñó el Dr. Eric Berne en su enfoque denominado “Análisis Transaccional”.

Las caricias son el medio a través del cual nos comunicamos con otra persona, valorándola por lo que es o lo que hace. Se definen como la unidad de atención y reconocimiento que una persona le da a otra. Estas pueden ser físicas o verbales. Las físicas generalmente se visualizan en un beso, un golpe, un abrazo, una palmada, una mirada, etc.

Las caricias se dividen en condicionales e incondicionales. Las incondicionales son aquellas caricias que se dan por lo que la persona es. No hace falta hacer nada para merecerlas.

En cambio, las condicionales se dan por el hacer de la persona. Dependen de lo que la persona ha hecho para merecerlas.

Una vez entendido esto, encontramos que existen caricias condicionales positivas y caricias incondicionales positivas, así como también existen las caricias condicionales negativas e incondicionales negativas.

Veamos algunos ejemplos. Con respecto a caricias incondicionales positivas tenemos frases como: “Eres linda”, “Te quiero”. Con respecto a caricias condicionales positivas tenemos frases como: “Eres muy trabajador”, “Te queda chévere esa camisa”.

En el plano de caricias negativas también tenemos ejemplos. Podemos ver caricias incondicionales negativas tales como: “Eres incompetente”, “No te quiero”. Las caricias condicionales negativas se pueden dar así: “¡Este trabajo está mal hecho, como de costumbre! ¡Nunca puedes hacer nada bien!”. Esta caricia condicional negativa es destructiva e hiriente. Pero una caricia condicional negativa puede ser útil y constructiva como en la siguiente frase: “Este trabajo no está bien hecho. Puedes hacerlo mejor.”

También existen caricias que en apariencia son positivas, pero realmente llevan un mensaje negativo, como por ejemplo, “¡Oye, qué bien te ves, para tu edad!”, “¡Para ser mujer, te desempeñas muy bien en la mecánica!”, “Pobrecito, después de tanto esfuerzo no lograste pasar el examen”. Estas caricias se denominan “plásticas”.


Concordando con Quintero y Boersner en su libro

“¡En mi casa no me entienden!”, para que una caricia nutra realmente a una persona a la cual está destinada, debe provenir de una fuente de amor y simpatía hacia esta persona. En contraste, una caricia que no proviene de esta fuente y se da con motivos ulteriores de interés personal, de manipulación, u otros motivos egoístas, se llama caricia falsa, que es sinónimo de caricia plástica.

Finalmente, se afirma que la caricia por ser de tan magna importancia en la vida del ser humano, siempre los seres humanos están dirigidos a la búsqueda de caricias. Donde escasean, probablemente se conformen con caricias negativas, debido a que cuando carecen de caricias positivas, una negativa es mejor que ninguna.
Artículo de Alessandro D’Amico. El Periodiquito.com.

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domingo, 27 de mayo de 2012

La ansiedad.. ¿Siempre es mala?

La Ansiedad


Siempre nos han hecho pensar que la ansiedad es algo malo para nosotr@s y nuestro cuerpo.. ¿Pero realmente siempre es así?

Aquí os dejo la definición de Ansiedad de la Wikipedia:

"Ante una situación de alerta, el organismo pone a funcionar el sistema adrenérgico. Por ejemplo, cuando el organismo considera necesario alimentarse, este sistema entra en funcionamiento y libera señales de alerta a todo el sistema nervioso central. Cuando se detecta una fuente de alimento para la cual se requiere actividad física, se disparan los mecanismos que liberan adrenalina, y se fuerza a todo el organismo a aportar energías de reserva para la consecución de una fuente energética muy superior a la que se está invirtiendo para conseguirla y que normalizará los valores que han disparado esa "alerta amarilla". En esos momentos el organismo, gracias a la adrenalina, pasa a un estado de "alerta roja".

El sistema dopaminérgico también se activa cuando el organismo considera que va a perder un bien preciado. En esta situación, el organismo entra en alerta amarilla ante la posibilidad de la existencia de una amenaza, que no es lo mismo que cuando la amenaza pasa a ser real, pues en ese caso lo que se libera es adrenalina.

Desde este punto de vista, la ansiedad se considera una señal positiva, de salud, que ayuda en la vida cotidiana, siempre que sea una reacción frente a determinadas situaciones que tengan su cadena de sucesos de forma correlativa: alerta amarilla, alerta roja y consecución del objetivo. Si la cadena se rompe en algún momento y esas situaciones se presentan con asiduidad, entonces el organismo corre el riesgo de intoxicarse por dopaminas o por otras catecolaminas. Esas situaciones ayudan al organismo a resolver peligros o problemas puntuales de la vida cotidiana."


Ahora os dejo la definición de Ansiedad Patológica también de la Wikipedia:

"En las sociedades avanzadas modernas, esta característica innata del hombre se ha desarrollado de forma patológica y conforma, en algunos casos, cuadros sintomáticos que constituyen los denominados trastornos de ansiedad, que tiene consecuencias negativas y muy desagradables para quienes lo padecen. Entre los trastornos de ansiedad se encuentran las fobias, el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno de pánico, la agorafobia, el trastorno por estrés postraumático, el trastorno de ansiedad generalizada, etc.

En el caso del trastorno de ansiedad generalizada, la ansiedad patológica se vive como una sensación difusa de angustia o miedo y deseo de huir, sin que quien lo sufre pueda identificar claramente el peligro o la causa de este sentimiento. Esta ansiedad patológica es resultado de los problemas de diversos tipos a los que se enfrenta la persona en su vida cotidiana, y sobre todo de sus ideas interiorizadas acerca de sus problemas."

Creo que la Wikipedia define perfectamente lo que es la Ansiedad como tal, buena y necesaria para momentos puntuales, y la Ansiedad cuando se vuelve patológica porque la sostenemos durante mucho en el tiempo.

¿Podemos hacer algo para manejarla?


Sí, por supuesto. 

El ejercicio físico, el Yoga, las técnicas de respiración, Las flores de Bach, entre otras muchas Terapias Naturales son efectivas para la Ansiedad. 

En otras ocasiones la Ansiedad es debida a otros factores como a los factores cognitivos (pensamientos) que tenemos acerca de nosotros mismos y el mundo. Este tipo de Ansiedad debe ser tratada en Psicoterapia.

¡Espero que este artículo haya  sido de vuestro interés!

Las relaciones posesivas.. ¿Una señal de amor?

Siempre se ha dicho (y estoy de acuerdo con ello) que la cuanto más celos@, posesiv@ y controlador/a eres.. más es la dependencia que tienes hacía esa persona.. Este tipo de dependencia es la llamada DEPENDENCIA EMOCIONAL.

Señores y señoras, los celos no es amor, es inseguridad hacía uno mismo de lo que es, de lo que vale y de cuánto los demás nos valoran y nos quieren. NO ES VERDADERO AMOR.


Si dudamos de si esa persona se irá con otr@, si nos abandonará, si a cualquiera que mira es porque le gusta más que nosotr@s.. Señores y señoras... ustedes son dependientes emocionales, no sienten amor, sienten inseguridad de vosotros mismos y tienen una falta de autoestima importante.

Prácticamente todo el mundo hemos sentido el MONSTRUO de los CELOS alguna vez. Pero sentirlo de vez en cuando no es patológico, significa que alguna vez hemos dudado de nosotros mismos pero nada más.

Ahora nos preguntamos:

  1. ¿Podemos dejar de sentir celos? 
  2. ¿Podemos dejar de ser dependientes emocionales? 
  3. ¿Podemos empezar a querernos y valorarnos lo que somos por nosotros mismos y no por lo que los demás piensen que somos o valemos?

La respuesta es: SÍ, POR SUPUESTO.

En Terapia se pueden solucionar este tipo de situaciones, y Señores y Señoras, no se crean que tardaremos meses o años, no, con muy pocas sesiones será suficiente, porque cuando empecemos a conectar con nosotros mismos, todo empezará a fluir.

¡PSICONÉCTATE!



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lunes, 21 de mayo de 2012

La Automotivacion y sus Repercusiones en la Salud Fisica y Mental

Se han realizado muchos estudios para investigar los efectos de la automotivación, la motivación y la salud mental. Dado que hay una gran necesidad de ayudar a personas que tienen una autoestima baja, depresión y ansiedad estos estudios y todos los esfuerzos de investigación es una labor que merece la pena. 


Los informes de Psicología que puedes encontrar en la red sobre estudios de las diferencias entre la motivación interna o automotivación y motivación externa señalan que “aunque nuestra sociedad está en gran parte motivada extrínsecamente, es decir motivada externamente por las recompensas externas, como el dinero, la fama o el poder, la investigación ha indicado que las personas que están intrínsecamente motivadas, o sea, motivadas por deseos internos o lo que es lo mismo automotivadas, lo están por la satisfacción de poder plasmar su creatividad, su satisfacción interior y curiosamente son psicológicamente más saludable y felices. 

Las investigaciones sobre la psicología de la salud busca entender cómo nuestra capacidad de lidiar con el estrés y los problemas a su vez puede ayudar a prevenir enfermedades y mantenernos saludables. 

Algunos de estos mecanismos psicológicos de adaptación son naturalmente innatos, pero pueden también ser enseñado a los que carecen de ellos, que en realidad no es que carezcan de ellos, es que están atrofiados por el desuso. 

La automotivación es una de las herramientas que los investigadores están tratando de utilizar como una solución de mantener un equilibrio ante las reacciones automáticas al estrés negativo. 

La automotivación es algo que utilizamos todos los días y es lo que nos permite sobrevivir para conseguir el alimento, porque tenemos hambre, para ir a trabajar para pagar las cuentas o conseguir información y educarnos, es decir, aprender con el fin de perseguir un objetivo mayor en nuestra vida. 

El mismo informe antes citado identificó que a los que responden a la vida con negatividad o con ansiedad lo más probable sientan ira, la culpa, frustración, miedo y por lo tanto esto hace que permanezcan nerviosos y sensibles. 

Estos sentimientos y emociones pueden causar hipertensión que puede conducir a un ataque al corazón o un derrame cerebral o incluso otras complicaciones más leves como úlceras, artritis, asma y enfermedades renales. 

Mediante un correcto dialogo interno contigo mism@ enfocado a reestructurar la forma en que la que vemos los eventos que ocurren en nuestra vida puede compensar los efectos físicos y mentales para asi poder hacer frente a los acontecimientos negativos o estresantes de una manera más consciente. 

En lugar de culpar a algo o alguien de lo que está ocurriendo en tu vida, tienes primero que tener la conciencia y después la automotivación suficiente para hacer frente a un problema y buscar una solución razonable. Este comportamiento positivo ayuda a alcanzar tus metas y a encontrar tu propia satisfacción personal.


¿Qué tal si aprendes a dominar tu automotivación para que no te afecten demasiado los desafíos del día a día y esto no repercuta en tu estado de salud física y mental?
Preguntas, dudas, sugerencias… todo eso déjamelo en un comentario. Leo todos los comentarios.



Fuente: http://automotivacion.wordpress.com 



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jueves, 17 de mayo de 2012

¿Lo que quiero o lo que debo? ¿Cuándo elegir una cosa o la otra?

¿Hacemos caso a la Razón o a la Emoción? e ahí la cuestión..


Frente a esta pregunta... Soy de la opinión que depende de la situación. Nada es blanco o negro.. a veces es gris claro otras veces gris oscuro y otras.. ¡de colores!

Muchas veces nos vemos en la situación que lo que queremos no nos conviene.. nos hace daño pero aún así seguimos ahí, sin poder salir, atrapad@s en ese bucle.. la mayoría de veces por "enganche emocional", otras por no tener los recursos necesarios para salir de ahí y otras.. ¡hay tantas variables que afectan! Cada persona es un mundo y cada uno puede tener unos motivos diferentes.

Cuando nos planteamos qué hacer frente este tipo de situaciones lo tenemos claro.. "quiero no hacer tal cosa, no estar con tal persona.. pero al final siempre vuelvo al mismo sitio."

Cuando nos encontramos en este tipo de bucles negativos la solución parece fácil para el resto de las personas pero para nosotros no. Sabemos la teoría pero no podemos aplicarla... y esto.. ¿por qué? Porqué la Emoción puede a la Razón.

¿Y podemos hacer que la balanza se incline para el otro lado? ¿Que finalmente la Razón pese más que la Emoción y podamos salir de ahí? Sí... Claro.

Muchas veces con apoyo profesional, con pocas sesiones bastarán para que todo se solucione, otras veces uno mismo lo podrá hacer.. RECUERDA QUE TODO ESTÁ DENTRO DE NOSOTROS.

Nosotros podemos hacer con nuestras vidas lo que queramos, el problema y la solución está dentro de nosotros. Nada es para siempre ni inmodificable.

Un recurso es pensar y decirse a uno mismo (hasta hartarse e incluso rayarse).. "HAZ CASO A LO QUE DEBES Y NO A LO QUE QUIERES".

RECUERDA: Los pensamientos se vuelven palabras y las palabras pensamientos.

Lo mismo pasa con las cosas buenas y maravillosas que nos pasan.. Es entonces cuando tenemos que dar rienda suelta a la Emoción (siempre con coherencia, claro) y no frenarnos por la Razón. Muchas veces no disfrutamos de algo porque creemos que no está bien hacer esto o tal cosa. La sociedad nos pone normas y reglas, unas incuestionables, otras no tanto. Nosotros mismos nos ponemos el freno, nadie más. Muchas veces dejamos de disfrutar de cosas maravillosas porqué la Razón puede a la Emoción.

Nosotros decidimos si algo está bien o no, si algo lo queremos en nuestra vida o no, nosotros somos dueños de nuestros sentimientos, de nuestros pensamientos, nosotros tenemos el control de nosotros mismos, nosotros decidimos cuándo, cómo y con quién queremos estar y ser felices. Nadie más que nosotros. 
Y si no podemos controlar algo que se nos escapa porque no depende de nosotros mismos, entonces déjalo estar, no conseguirás nada por más que lo intentes.



Espero que este post os sirva para PSICONECTAROS con vosotros mismos un poquito más.





viernes, 11 de mayo de 2012

Fundamentos de la Terapia Breve

Mi lema es "Menos es más" y en terapia psicológica no iba a ser menos. En consulta podemos solucionar muchos problemas con pocas sesiones.

Actualmente nos encontramos en un mundo de cambios vertiginosos e incluso dolorosos que han traído como consecuencia entre otras cosas, la pérdida de empleo, la falta de unión familiar, presiones económicas y la pérdida de valores, estos problemas aunados a los conflictos conductuales, depresivos y problemas en las relaciones de pareja, conflictos en el trabajo, adicciones, hábitos, problemas alimenticios, fobias, transtornos psicosomáticos, stress, insomnio y un sin fin de transtornos de índole psicológico; demandan soluciones rápidas y adecuadas basadas en terapias breves y efectivas que eviten en la medida de lo posible los tratamientos tradicionales de larga duración.

¿Qué es la Terapia Breve?

La Terapia Breve es un nuevo modelo de terapia que busca solucionar los problemas de la manera más rápida, eficiente y poco dolorosa. Busca atacar el problema que determine el paciente como el causante de su conflicto "Aquí y Ahora". En contraposición al Psicoanálisis tradicional que su enfoque se basa en el pasado, la Terapia Breve acude al pasado únicamente en dos casos: cuando el paciente lo considera importante para solucionar su problemática ACTUAL, o cuando el terapeuta estime obtener recursos adicionales y útiles para ampliar la gama de posibles soluciones al problema planteado.

Si bien la Terapia Breve como lo indica su nombre, implica tratamientos mucho más cortos respecto a otras técnicas tradicionales, esto no significa que la Terapia Breve sea fácil. Su principal enfoque involucra cambiar de una forma e pensar lineal (causa-efecto) a uno sistémico (sistemas, subsistemas y sus interacciones), es decir, no se trata al individuo y su problema en forma aislada, sino que lo considera dentro de su contexto actual y sus interelaciones. Esta filosofía es la que permite a la Terapia Breve aplicarse adecuadamente tanto al tratamiento de familias, como de parejas, individuos, u otros sistemas de interacción humana.

La Terapia Breve es dinámica y flexible, en donde se identifican los problemas y la gama de posibles soluciones, de igual forma se analizan los intentos de solución pasados, para fijar metas y alcances del tratamiento y diseñar las intervenciones adecuadas a cada caso. Esto convierte al proceso de terapia en un esquema totalmente interactivo en donde se complementan las dos partes expertas: el experto en técnicas de Terapia Breve (el terapeuta) y el experto en su problemática (el paciente).

Para que la terapia resulte exitosa, es necesario definir claramente el problema que el paciente desea solucionar, es decir se debe estructurar el problema en términos de las conductas, las interacciones, y/o la comunicación implicada en el mismo, además de cuando ocurre, en donde, con qué frecuencia, a quién le afecta el problema, desde cuando es problema, cómo lo vive cada miembro del sistema, etc.

Por ejemplo, el término "depresión" puede significar para una persona l conjunto de ciertas manifestaciones, tales como: la pérdida de apetito, insomnio y apatía; mientras que para otra persona el mismo término podría percibirse mediante otro grupo de manifestaciones distintas con el llorar continuamente, la distracción o la falta de decisión. Las metas de terapia se definen en relación a cambios concretos que se desean lograr, comenzando con cambios pequeños en los subsistemas los cuales acarrean grandes y notorios cambios que repercuten en todo el sistema.

Una característica peculiar de la Terapia Breve es el trabajo en equipo, esto significa que aunque a cada caso se le asigna un terapeuta principal, existe un grupo adicional de terapeutas al pendiente del desarrollo de las sesiones a través de un circuito cerrado de televisión o de un espejo unidireccional. Los terapeutas del equipo se comunican con el terapeuta principal y comparten sus ideas, comentarios o sugerencias en vivo o en el análisis posterior mediante el uso de videocintas. El trabajar en equipo agiliza el proceso de terapia y recorta el tiempo de tratamiento ya que el paciente cuenta con varios enfoques y puntos de vista respecto a su caso particular.

¿Quién debe acudir la Terapia Breve?

Cualquier persona que se sienta inmersa en alguna problemática, que haya intentado alternativas de solución y que no haya logrado el cambio deseado es una persona susceptible de acudir a una Terapia Breve. Para acudir a este tipo de terapia no necesariamente tiene que existir una patología específica catalogada, basta que sea una situación que el paciente identifique como problema. Todos en algún momento de nuestras vidas nos sentimos agobiados por algún problema o situación que deseamos cambiar y aparentemente no podemos.

Artículo de Terapiabreve.com

La Mentira.. ¿Como detectarla?

Mentiras: ¿Cómo detectarlas? Los signos verbales, gestuales y físicos que delatan a un mentiroso

 

Hay gente que no sabe mentir, y se le nota; pero hay otros, mejor dotados para el arte del engaño, que son capaces de contarnos convincentemente las cosas más disparatadas sin que se les mueva un pelo. Del mismo modo, existen personas altamente talentosas para desenmascarar a los mentirosos, mientras que otras ni siquiera sospechan que están siendo víctimas de un fabulador.

Afortunadamente, casi no existe la mentira perfecta. Puede haber crímenes perfectos, que no dejen una sola huella, pero no ocurre lo mismo en el terreno del engaño. Eso sí, para captar a tiempo esos indicios, el oyente debe conocer ciertas claves, sin las cuales la mentira le pasaría desapercibida como el aire que respira. Y no sólo conocerlas, sino mayormente mantenerse alerta: los signos delatores pueden durar fracciones de segundo, de modo que hay que transformarse en un agudo observador. Es una habilidad que se adquiere y desarrolla con el conocimiento y con la práctica, sumamente útil para la vida en sociedad.

¿Cuáles son, entonces, las claves que nos permiten descubrir cuándo nos están mintiendo? Estas aparecen en el aspecto físico, en la comunicación no verbal y en el mensaje verbal. A continuación listaré los puntos más relevantes, con la aclaración de que en cada persona, según sus características individuales, se evidencian algunos y otros no. La aparición de uno de ellos puede ser casual, o incluso de dos, sin evidenciar una mentira, pero cuando se registran varios en forma prolongada y recurrente es mucho más probable que la persona no está diciendo la verdad.

En el aspecto físico:
  • Se les acelera el ritmo cardíaco y la respiración.
  • Se les enrojece el rostro.
  • Empiezan a sudar, frecuentemente en la palma de las manos.
  • Se ponen temblorosos, en especial las manos y la mandíbula.
En la comunicación no verbal: es un error intentar encontrar la mentira mirando al mentiroso a la cara, ya que las expresiones de esta son las que más puede controlar conscientemente. Antes bien, es más fructífero observar la conducta corporal global, ya que por medio de ella se "filtra" la mayor parte de la información que la persona está queriendo ocultar.
  • No nos miran a los ojos, o mantienen poco la mirada. Los ojos son el acceso simbólico a la intimidad. Quien mira a los ojos, no tiene nada que ocultar, no le teme al encuentro con la intimidad del otro. Quien no mira a los ojos, teme ser descubierto en "offside". De ahí la tradicional frase "mírame a los ojos y dilo nuevamente".
  • Mueven demasiado poco las manos y los pies. En ciertos casos, frotan las piernas entre sí, con movimientos tensos.
  • Esconden las manos o las retuercen. Enseñar las palmas es indicador de honestidad. Quien esconde las manos detrás del cuerpo o en los bolsillos probablemente esté intentando ocultarnos algo. Lo mismo hay que pensar de quien se las frota o retuerce con cierta tensión, como si quisiera lijar una mano con otra o hacer nudos con sus dedos. Posiblemente, intente trasladar la tensión a un objeto que tenga a mano, al cual tocará sin cesar.
  • Gesticulan poco. Tienden a eliminar el uso de los gestos, en especial los ilustradores, por temor a que el menor movimiento pueda dar indicios de su nerviosismo. También disminuye el desplazamiento natural de la cabeza.
  • Se tapan la cara con las manos, tocándosela de varias formas. Así delatan la incomodidad que sienten al mentir. Rascarse el cachete, la nariz o la barbilla, sacarse inexistentes basuritas de los ojos o de la comisura de los labios, comerse las uñas, ahogar bostezos de nervios, tocarse las orejas, etc.
  • Cambian de postura muy frecuentemente.
  • Se llevan una mano al cuello y se masajean. Esto es una reacción inconsciente al hormigueo nervioso que experimentan por la tensión muscular que provoca la mentira.
  • Tardan más en contestar y hacen más pausas. Si el mentiroso no es talentoso, le costará ser espontáneo, y se notarán sus esfuerzos por calcular lo que va a decir.
  • Hablan más rápido, y con un tono de voz más agudo.
  • Movimientos de fuga abortados. Por ejemplo, cuando alguien que está sentado posa las manos sobre sus rodillas como para levantarse y luego las quita, o cuando se apunta con el pie hacia la salida. Posiciones como estas denotan que la persona se siente incómoda mintiendo y se quiere ir.
  • Conducta global de incomodidad. Comprende todo lo ya dicho más cualquier otro indicador que haga pensar que, sin fundamentos aparentes, la persona está nerviosa o intranquila mientras habla.
En la comunicación verbal:
  • Dan pocos detalles. Hablan con vaguedades.
  • Hablando sobre conversaciones, evitan hacer citas textuales. Nos cuentan su versión de las cosas.
  • No hacen referencias temporales, espaciales ni sensoriales. Les cuesta imaginar horarios, lugares, olores, colores, etc. de los "mundos" que inventan.
  • Incluyen en la historia la mayor cantidad de verdades posibles, y entre ellas intercalan las mentiras.
  • Se contradicen. Quien inventa muchas cosas ante mucha gente rara vez recuerda sus mentiras, de modo que en algún momento siempre terminan siendo inconsistentes.
  • Tienen lapsus verbales.
Aún está en discusión por qué los seres humanos, por lo general, no son capaces de descubrir las mentiras sin un entrenamiento especial. Paul Ekman, experto en comunicación no verbal, piensa que puede deberse a las siguientes razones, tal como se expone en el blog Babalum:
  • Las habilidades para reconocer mentiras tuvieron muy poca relevancia en la evolución de la especie. En ese entorno ancestral había muy pocas oportunidades de mentir en temas de importancia. Se vivía sin privacidad y todo ocurría delante del resto de los miembros de la tribu o poblado. Además, estas sociedades se caracterizaban por una total dependencia de los demás para cazar, defenderse, etc. Esto implica tener que colaborar constantemente y poder confiar en los demás. Una mentira descubierta podría haber significado el arrinconamiento o expulsión y una muerte segura.
  • No nos educan para reconocer mentiras.
  • Muchas veces no nos interesa descubrir mentiras. Si supiésemos la cantidad de veces que nos mienten, incluso por parte de personas de confianza y cercanas, nos alegraríamos de nuestra capacidad para ignorarlas. La confianza en los demás no es solo necesaria sino que hace más fácil vivir.
  • Muchas veces nos gusta que nos mientan, y lo buscamos. Como cuando una señora le pregunta a su marido "¿quién era la más linda de la fiesta?", para que este le responda "Naturalmente, tú mi amor".
Lo cierto es que muchas mentiras, cuando las creemos, nos traen montones de disgustos. Y, como es imposible mentir sin dar indicios, está en nosotros entrenarnos para identificar a los mentirosos, para agarrar al vuelo los signos que los delatan. Aprovechemos la riqueza de los contactos personales para darnos cuenta de quiénes son sinceros con nosotros y quiénes no, porque, cuando la comunicación es escrita o telefónica, es mucho más fácil ocultar una mentira. El cuerpo es lo que más nos delata.

Artículo de cajadecambios.blogspot.com.es 


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10 Consejos para ser positivo

¿Cómo pensar en Positivo?

¿Cómo actúa la gente que tiene éxito? ¿Cómo son positivos? ¿qué ideas y qué métodos siguen? El staff of Investor’s Business Daily hizo un seguimiento de las personas con éxito en la vida, especialmente en el mundo de los negocios y en el ámbito profesional y laboral... Y estos son los diez consejos estrella:  


La forma de pensar es clave. Cómo piensas es determinante. Al respecto, "pensar positivamente en cada momento da una ventaja fundamental. Al respecto se deben visualizar éxitos no fracasos. Se debe evitar gente negativa y ambientes negativos. Eres lo que piensas".

Decide tus propios sueños y objetivos. Sé concreto a la hora de fijar tus objetivos. Por ejemplo no digas "me gustaría empezar a hacer ejercicio este mes" sino "voy a empezar a hacer ejercicio este mes". Haz un plan meticuloso y cúmplelo.

Pasa a la acción. Los objetivos por sí solos no tienen sentido sino se pasa a la acción para hacerlos realidad. Simplemente ponte a ejecutarlos sin vacilar. En el ejemplo anterior: Compra tu ropa de deporte, apúntate al gimnasio y controla el rendimiento creciente de tus dos primeras semanas..

Nunca dejes de aprender. Nunca pares de aprender, Toma clases, lee libros, participa en grupos, adquiere nuevas habilidades continuamente

Sé persistente y trabaja duro. Alguna vez habrás oído la expresión "el camino del éxito es una maratón, no un sprint". Mantén tu objetivo, lucha por él y trabaja duro de forma persistente. No te rindas.

Aprende a analizar los detalles. Obtén todos los hechos, pide todos los datos, todas la variables claves. Esto te ayudará a tomar las decisiones más sabias. Aprende de tus errores, pero no dejes que te batan. 

Centra tu tiempo y dinero. Cuando creas en algo, pon toda tu atención y energía en ello. No dejes que la gente te distraiga. 

No temas ser innovador. Sé diferente, intenta ser innovador. El mundo se mueve continuamente, progresando. No pares tu mundo. Ten ideas propias sobre lo que tiene éxito idea. No sigas la multitud.

Comunícate con la gente de forma efectiva. Una persona no es una isla. Comunica tus pensamientos y tus deseos de forma sincera. Anima a terceros a comunicarte de forma sincera contigo. Practica el entendimiento y la motivación con la gente. 

Actúa con honradez. Toma la responsabilidad de lo que haces. Nunca hagas trampas o mientas. Cuando hagas una promesa manténla. Cuando cometas un error admítelo. 


Artículo de euroresidentes.com 


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El deporte y el estrés.. ¡Libera tensiones!

El problema de la salud mental se ha agudizado severamente en la sociedad actual. 
Una investigación realizada por el Instituto Nacional de Salud Mental Americano -NIMH- (Regier et al., 1984) sobre una muestra de 17.000 personas de cinco comunidades, utilizando como fuente de diagnóstico el DSMMD (American Psychiatric Association, 1980) indicó que durante seis meses, un 20% de la población adulta sufrió de alguna manera de algún trastorno mental y hace una estimación que entre el 29 y el 38% de los americanos adultos puede padecer algún problema psiquiátrico significativo durante sus vidas (Robins et al., 1984). 
 
Una gran parte de los trastornos y de los síntomas se relacionan con el estres, como la ansiedad y la depresión (Regier et al., 1988). Para tratar estos trastornos tradicionalmente se usa la psicoterapia y la medicación.

El valor del ejercicio para la prevención y tratamiento de la ansiedad y la depresión, según Burton (1632), era conocido por los médicos desde la época de Hipócrates. El interés de los médicos en el uso del ejercicio para la salud mental declinó a mediados de este siglo, cuando la psicofarmacología y la neurobiología desarrollaron drogas eficaces para combatir la depresión y los psicólogos y psiquiatras adoptaron la psicoterapia para ayudar al ser humano en sus trastornos emocionales (Campbell & Davis, 1940). Poniendo énfasis en el papel de la conducta en la prevención y en la lucha contra las enfermedades, hubo un retorno hacia la influencia del ejercicio en la etiología y en el tratamiento de los problemas emocionales (USDHHS, 1990). 

Actualmente, existe literatura específica que registra la eficacia del ejercicio y del deporte para el mejoramiento de diversos factores emocionales del ser humano y se está aplicando el término PSICOTERAPIA A TRAVES DEL MOVIMIENTO (Rümmele, 1990). 

Considero importante presentar algunos aportes para que el lector pueda comprender las distintas posibilidades de aplicación del ejercicio y del deporte para beneficiar el área emocional de los practicantes, ya sea un sujeto saludable, un atleta de élite o de recreación o también un portador de trastornos o de diversas deficiencias. 

Definición de ejercicio y deporte

El Colegio Americano de Medicina del Deporte - ACSM (1990) clasifica el ejercicio o el deporte en tres tipos: 
a) cardiorrespiratorio (aeróbico); 
b) fuerza o resistencia muscular; 
c) flexibilidad. 

La mayoría de los estudios realizados para verificar la influencia del ejercicio sobre el área emocional del ser humano, utilizaron actividades aeróbicas como la carrera, natación o ciclismo. Algunos realizaron ejercicios anaeróbicos (entrenamiento de fuerza). No fueron utilizados ejercicios de flexibilidad. 
 
El deporte utilizado en las investigaciones, son actividades deportivas, individuales o colectivas, que poseen una reglamentación a nivel internacional, practicados desde las escuelas deportivas, el deporte adulto recreativo, así como el de alto rendimiento. 

Ejercicio, deporte y ansiedad

El ejercicio y el deporte promueven una reducción significativa de la ansiedad-estado y sus medidas fisiológicas correlacionadas. De acuerdo con el meta-análisis de Petruzzello (1991), examinando la ansiedad-estado, la ansiedad-rasgo y los correlatos fisiológicos de la ansiedad, no importa COMO la ansiedad sea considerada, no hay duda que el ejercicio está asociado con una reducción de esas tres medidas, de acuerdo con la edad, sexo y modelo de salud mental. Una sesión de ejercicios aeróbicos, por ejemplo, es suficiente para reducir la ansiedad de individuos ansiosos (Folkins & Sime, 1981; Mihevic, 1982; Morgan, 1985). Para producir un efecto tranquilizante el ejercicio debe ser rítmico, como la caminata, la carrera, saltar sobre obstáculos, o andar en bicicleta, manteniendo una duración de 5 a 30 minutos, en una intensidad del 30 al 60% de la intensidad máxima permitida para el sujeto (DeVries, 1981). 

Algunos programas de ejercicio no reducen la ansiedad (Hughes, 1994; Morgan & Goldston, 1987; Sorensen, 1987) porque no respetan un mínimo de tiempo necesario. La reacción de ansiedad es algo individual y suponer que el ejercicio o el deporte puedan alterar este patrón es algo irreal. Es necesario un tiempo de práctica de entre 4 a 20 semanas. Así también, para trastornos de pánico y agorafobia los resultados han sido controvertibles. 

Ejercicio, deporte & Depresión

El ejercicio y el deporte han sido considerados, ya hace cierto tiempo, como una medida higiénica (Antonelli, 1974; Becker Jr., 1985a; 1986). Desde una óptica opuesta, algunos investigadores (Doyne et al., 1987), llegaron a la conclusión que la falta de ejercicio es un factor importante para la aparición de síntomas de depresión. La posibilidad de reducción de los síntomas de ansiedad y depresión por medio del ejercicio, contribuyó para que varios psicoterapeutas comparasen el ejercicio con diversos tipos de psicoterapias tradicionales, demostrando que tanto el ejercicio aeróbico como anaeróbico presentan un valor similar a cualquier procedimiento de psicoterapia tradicional. Martinsen y colegas (1994), revisando 2 estudios quasi-experimentales y 10 experimentales de intervenciones del ejercicio sobre pacientes depresivos señalaron que el ejercicio aeróbico es suficiente para reducir la depresión unipolar sin melancolía y/o conductas psicóticas. 

El ejercicio físico puede ser una alternativa al tratamiento o una ayuda en un tratamiento con dispositivos tradicionales de psicoterapia en la formas unipolares de depresión leve o moderada (ISSP, 1992; Bosscher, 1993). Existen dudas si diferentes intensidades en el ejercicio y el deporte presentan beneficios emocionales diferentes a sus practicantes. De acuerdo con Paffenbarger y colegas (1984), el ejercicio debe ser riguroso para estar asociado con un beneficio emocional. No obstante, Leon y colegas (1987) verificaron que el ejercicio moderado ofrece al ser humano un beneficio emocional igual al ejercicio vigoroso. Por otro lado, los ejercicio de alta intensidad, no reducen la depresión y determinan aumento de la tensión, irritación, fatiga y disturbios del carácter. 

Un resumen de la consideración (Statement) realizada por los directivos de la International Society of Sport Psychology - ISSP (1992), merece ser presentada para cerrar este artículo. Esta consideración refiere: 

El proceso del ejercicio, ya sea de corta o larga duración, causa un bienestar mental y mejoría psicológica. La actividad física es causante de una mejora en la autoestima que produce beneficios en la hipertensión, osteoporosis, crisis diabéticas y varios trastornos psiquiátricos. Es una forma efectiva como otras formas de psicoterapia para el paciente depresivo. Los beneficios individuales del ejercicio incluyen: 
a) reducción de la ansiedad-estado; 
b) reducción a niveles mínimos y moderados de la depresión; 
c) reducción de los niveles de estress; 
d) reducción de los niveles de neurosis; 
e) colabora en el tratamiento de la depresión severa; 
f) beneficia psicológicamente a ambos sexos y a todas las edades. 

Artículo de deportesalud.com 


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